Hay novedades en la puja que ha enfrentado a muchos vecinos y comerciantes de las comunas 7, 10 y 9 por el proyecto ya iniciado por el GCBA, de un Metrobús de mano única que va desde San Pedrito hasta Bruix, hacia General Paz por Av. Juan B. Alberdi y hacia el centro por Av. Directorio. Llamó mucho la atención desde el inicio porque incide mayormente donde el tránsito avanza fluido, atraviesa varias zonas comerciales a cielo abierto e incluye la prohibición de estacionamiento en ambas márgenes de las dos avenidas.
El diseño de estos engendros de cemento, que modifican nuestros paisajes barriales, sin estudios de impacto ambiental ni beneficios reales para los pasajeros de transporte público, fue realizado por Lucila Capelli, y Clara Sanguinetti, respectivamente Secretaria y Directora General de Diseño e implementación de la subsecretaria de Planificación y Movilidad del GCBA, dos funcionarias de escritorio que desconocen nuestros barrios y saltearon todas las instancias participativas de decisión que están previstas en la Constitución de la Ciudad de Buenos Aires. ¿Qué nos rige en la Ciudad de Buenos Aires, una democracia o una dictadura a favor de empresas constructoras? Porque no es solo votar, hay leyes…
Una sorpresiva consecuencia de todo esto, fue que Larreta logró enfrentar entre sí a muchos de sus propios votantes, algunos de sus comuneros votaron en contra del Metrobús en sus Juntas Comunales y los vecinxs enojados se vieron más representados por los comuneros del Frente de Todos que los acompañaron desde el principio.
Entonces, estos comuneros, junto con los Consejos Consultivos, Asociaciones de Comerciantes y Agrupaciones vecinalistas, luego de intensas reuniones y concurridas movilizaciones con fuerte apoyo vecinal, consiguieron que el 17 de febrero la Jueza Liberatori dicte un amparo, en el que reconoce el déficit en participación ciudadana que tuvo el GCBA en el proyecto, obliga a tratar el tema en Juntas y Consejos Comunales, cita a una mesa de trabajo para el 28 de marzo, que se difunda la instancia por TV, radios y solo habilita continuar con la obra en su etapa “preparatoria” (sin perjuicio de otros reclamos que puedan surgir).
Ahora bien, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, como es su costumbre, no respeta el fallo judicial y deja a la comunidad desamparada y sin el contralor del sistema democrático. ¿Así, que nos queda a los vecinos?. Está bien documentado que se han realizado movimiento de suelos, demolición de pavimentos sanos y repavimentación, que son étapas avanzadas de la obra, no de preparación como bien lo aclaran los pliegos de licitación.
En próxima edición les informaremos las novedades sobre este despropósito, este ataque a las identidades barriales y la democracia participativa que claramente rige en la Constitución de la ciudad.
© Nota publicada originalmente en la Revista Floresta y su Mundo edición 384 (Marzo 2023)
